Una inscripción de 1832 atestigua la historia de esta antigua casa de labranza ubicada en una tranquila aldea gallega. Con hórreo tradicional, horno de leña y alpendre de piedra, esta propiedad rural ofrece la oportunidad única de restaurar un legado centenario en el corazón de Galicia.
Esta propiedad se encuentra en una tranquila aldea a tan solo 3 km del centro de Antas de Ulla, 50 km de Lugo y 70 km de Santiago de Compostela. Situada en el centro geográfico de Galicia, la finca se asienta sobre aproximadamente 3000 m² de terreno llano en una ubicación con excelente conectividad, que mejorará aún más con la finalización de la autovía a Santiago, permitiendo llegar a la ciudad compostelana en poco más de media hora.
La casa principal data del año 1832, como atestigua la inscripción grabada en el dintel de piedra de la entrada principal. Este conjunto rural conserva la esencia de la arquitectura tradicional gallega, con muros de mampostería, tejados de teja y una singular chimenea de piedra que habla de su pasado noble.
La casa de labranza necesita una reforma integral, pero ofrece una base sólida para crear un hogar único que combine su carácter histórico con las comodidades modernas. Uno de los laterales alberga un horno de leña, detalle característico de la arquitectura rural gallega.
Detrás de la casa se extiende una aira de piedra, superficie tradicional que antiguamente se utilizaba para mallar el trigo. Junto a ella se encuentra un hórreo gallego de grandes dimensiones y bien conservado, y un alpendre construido en piedra.
La finca cuenta con una huerta fértil que tradicionalmente se ha beneficiado del agua sobrante de una fuente situada al otro lado del camino. Los terrenos llanos y su orientación favorable mantuvieron durante años la vocación agrícola de esta propiedad, ofreciendo múltiples posibilidades para el cultivo o la creación de jardines.
Antas de Ulla se encuentra en la Comarca da Ulloa, enclave natural privilegiado donde nace el río Ulla, que recorre 132 kilómetros hasta desembocar en la ría de Arousa. El territorio se caracteriza por su rico patrimonio natural, donde se alternan bosques de especies autóctonas, prados y tierras fértiles que han mantenido su vocación agrícola durante siglos. La gastronomía local destaca por el pan de Antas, elaborado en hornos de piedra tradicionales, y el queso con Denominación de Origen Arzúa-Ulloa.
La zona ofrece acceso privilegiado a puntos de interés destacados como el Castillo de Pambre (a 15 km), única fortaleza que resistió las revueltas irmandiñas, la iglesia románica de Vilar de Donas (Patrimonio Histórico-Artístico), o la histórica villa de Melide con su conjunto medieval y famosas pulperías.
La finalización inminente de la nueva autovía convertirá este enclave en un punto excepcionalmente accesible, mejorando su conexión con Santiago de Compostela, ciudad con aeropuerto internacional, y Lugo capital, ciudad Patrimonio de la Humanidad reconocida por su valor turístico, cultural y gastronómico.
Esta casa de labranza representa una oportunidad única para restaurar un legado auténtico del siglo XIX, en un entorno rural que combina historia, tradición y naturaleza.
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